Recuerda que el inconsciente no sabe de errores o bromas, todo lo que le digas se queda en su mente como creencia y tiene un peso muy importante en su vida, así que por favor evita frases como
“Eres un tonto”
“Porque eres tan desobediente”
“Miedoso”
“Es que es tan lento”
“Eres un burro”
Todo lo que le digas, incluso si no se lo dices directamente, lo integrará y de alguna manera marcará su personalidad.
Yo sé que muchas veces lo hemos hecho, es obvio que no lo hacemos por maldad y en la mayoría de los casos, sin ser conscientes de lo que implica.
Hoy te invito a prestar más atención y cuidado en lo que le dices a tus hijos, porque créeme que aunque parezca exagerado, definitivamente dejará una huella, porque cuando etiquetamos, marcamos un camino.
Hay que ser conscientes de que todo lo que hacemos y decimos, tiene una consecuencia en la vida de nuestros hijos.
Si te gustó esta reflexión compártela, para que llegue a más personas.